sábado, 27 de agosto de 2011

La historia de mi vida


Me detuve unos segundos antes de responder, tomé aire y así como así brotó de mi corazón:
-Amy, yo sé lo que en verdad es el sufrimiento. He estado muy cerca de él, más bien he vivido con él durante casi tres años –corregí acaparando la atención por completo de la muchacha. Sus ojos se abrieron de par en par y pude ver muy dentro de ellos como el verde agua de su iris pasaba a ser un verde musgo profundo, tanto como el mar- sé lo que se siente ser pisoteada por un hombre, humillada delante de todos tus amigos e irremediablemente una mala hija para tus padres. Aún recuerdo todos los malos momentos por los que tuve que pasar. Se lo que se siente que una persona no corresponda a tu amor, que tome tus sentimientos con un cuidado extremo y de un segundo a otro arrebate con ellos contra una pared y los hago añicos. Se lo que es vivir todo el día encerrada en tu habitación con miedo a salir mientras tus amigos se acostumbran de tu ausencia. Se lo que es ver llorar a tus padres por tu culpa, arruinarles la vida y su trabajo, como sus ojeras y canas comienzan a florecer a temprana edad y se convierten en una flor marchita, quitándoles años de vida –tome aire, decir aquello me estaba costando más de lo que imaginaba, pero solo me quedaba algo por decir- Amy, no espero que me entiendas y ojalá jamás tengas que pasar por algo similar para comprenderme. Pero he sufrido tanto todos estos años, que una vez que encuentras a una persona que ilumina tu camino, te toma de la mano y te conduce a una vida nueva simplemente quieres vivir en felicidad por el resto de tu vida con ella.

No hay comentarios:

Publicar un comentario